Con la irrupción de pandemia en nuestras vidas, pequeños gestos o tareas que hasta el momento nos pasaban desapercibidas, a las que apenas prestábamos atención, o que incluso nunca nos habíamos planteado cómo hacer, se han convertido en obligatorias. La limpieza se ha extremado a nuestro alrededor en las superficies y elementos más insospechados, de manera que ya no nos extraña ver a comerciantes o trabajadores pasando trapo y lejía de manera constante a sus instalaciones. Nosotros mismos lo hacemos en casa, con nuestro coche, nuestras manos…
Hay elementos cotidianos que requieren una limpieza cuidadosa, ya que su uso es colectivo y la seguridad de su funcionamiento así lo requiere. Limpiar el ascensor para sea un elemento seguro es una rutina que antes podía ser ocasional y ahora se ha vuelto diaria. Tal vez tras esta experiencia seamos conscientes de que más allá del COVID, otros virus como el de la gripe pueden ser mitigados gracias a una limpieza más concienzuda y habitual en elementos comunes como los ascensores.
Para estar seguro con el ascensor de tu edificio recuerda estos puntos clave:
- Desinfecta los botones con alcohol 75º.
- Limpia siempre rociando en un trapo sin usar, nunca aplicando directamente.
- Pasa el trapo por paredes, pasamanos y manecillas o tiradores del ascensor.
- Complementa limpiando las puertas y sus inmediaciones de polvo y otras suciedades.
- Durante la limpieza no te toques la cara.